Autoridad del NIST

Ley Nacional del Equipo de Seguridad en la Construcción

Ley Nacional del Equipo de Seguridad en la Construcción (NCST), firmada como ley el 1 de octubre de 2002, autoriza al NIST a establecer equipos para investigar la falla de un edificio o edificios que haya resultado en una pérdida sustancial de vidas o que represente un potencial significativo de pérdida sustancial de vidas. Como agencia no reguladora, el NIST no considera los hallazgos de culpa, responsabilidad o negligencia. Las investigaciones se llevan a cabo bajo las autoridades de la Ley para mejorar la seguridad y la integridad estructural de los edificios en los Estados Unidos. En este contexto, la Ley otorga al NIST y a sus equipos amplias autoridades de investigación para: acceder al lugar de un desastre en un edificio, citar evidencias, acceder a piezas clave de evidencia, tales como registros y documentos, y mover y preservar pruebas.

Un Equipo Nacional de Seguridad en la Construcción llevará a cabo las siguientes tareas:

• establecer la causa o causas técnicas probables de la falla del edificio,
• evaluar los aspectos técnicos de los procedimientos de evacuación y respuesta ante emergencias, recomendar, según sea necesario, mejoras específicas a las normas, códigos y prácticas de construcción basadas en los hallazgos,
• recomendar cualquier investigación y otras acciones apropiadas necesarias para mejorar la seguridad estructural de los edificios, y mejorar los procedimientos de evacuación y respuesta ante emergencias, basados en los resultados de la investigación.

Ley Nacional de Reducción del Impacto de Vendavales

Con la promulgación de la Reautorización de la Ley Nacional de Reducción del Impacto de Vendavales de 2015, el 30 de septiembre de 2015, el NIST ha sido designado como la Agencia Líder para el Programa Nacional de Reducción del Impacto de Vendavales (NWIRP). Otras agencias designadas del Programa son la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA), la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) y la Fundación Nacional de Ciencias (NSF). La Administración Federal de Carreteras (FHWA) también ha participado en el NWIRP desde su creación con PL 108-360 en 2004. Otras agencias federales están invitadas a participar en las actividades del NWIRP, entre las que ya participan se encuentran el Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano (HUD), el Cuerpo de Ingenieros del Ejército de los Estados Unidos (USACE), el Departamento de Energía (DoE) y el Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS). Los resúmenes de las actividades anteriores del NWIRP están disponibles en los informes bienales del Programa al Congreso.

El Congreso estableció el NWIRP "...para lograr importantes reducciones medibles en las pérdidas de vidas y propiedades causadas por los vendavales a través de un esfuerzo Federal coordinado, en cooperación con otros niveles de gobierno, el sector académico y el sector privado, con el fin de mejorar la comprensión de los vendavales y sus impactos, y desarrollar y fomentar la implementación de medidas de mitigación con un costo apropiado para reducir esos impactos”.

Como agencia líder del NWIRP, el NIST tiene la responsabilidad principal de planificar y coordinar el Programa. Esta responsabilidad incluye:

• asegurar que el Programa incluya los componentes necesarios para promover la implementación de medidas de reducción del riesgo de vendavales, apoyar el desarrollo de herramientas de ingeniería basadas en el rendimiento y trabajar con los grupos apropiados para promover la aplicación comercial de dichas herramientas,
• solicitar la asistencia de agencias Federales que no sean las agencias del Programa, como sea necesario,
• coordinar todas las investigaciones Federales posteriores al vendaval en la medida de lo posible, y cuando lo justifiquen las investigaciones o los hallazgos de la investigación, formular recomendaciones para ayudar a informar del desarrollo de códigos modelo, y proporcionar información al Congreso sobre el uso de dichas

Bases de la investigación del NCST

El Huracán María representó una oportunidad única para recopilar datos perecederos sobre los daños a los edificios y la infraestructura, así como sobre el desempeño del sistema de manejo de emergencias sobre el terreno. En particular, este evento tuvo las siguientes características que justificaron que el NIST desplegara un equipo de reconocimiento preliminar en diciembre de 2017:

• vientos extremos experimentados en toda la isla, incluyendo ráfagas pico de más de 225 kilómetros por hora (más de 140 millas por hora) en las cercanías de San Juan, Extensos daños a los servicios públicos y a la infraestructura de transporte, comunicación y educación, gran parte de los cuales aún no estaban operativos meses después de la tormenta, y Problemas de evacuación y refugio para un evento que afecta a toda la isla, incluidas las comunicaciones de alerta y la respuesta del público.

Esta investigación dará lugar a recomendaciones para mejorar los códigos, normas y prácticas, de manera que se refuercen los edificios y la infraestructura en un área propensa a huracanes, se salven vidas y se proteja la propiedad en futuras tormentas.